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Tendencias urbanas: la estética «gangster» y el impacto de Lamine Yamal en la moda juvenil

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La fiesta de cumpleaños de Lamine Yamal, jugador del FC Barcelona, el pasado 13 de junio, desató una controversia inesperada en el mundo de la moda y la cultura juvenil. Sin embargo, más allá de las polémicas que se generaron, uno de los aspectos más destacados del evento fue la estética «gangster» que marcó la celebración, convirtiéndose en el epicentro de una nueva tendencia que está ganando terreno en las redes sociales y en el estilo de vida de la generación Z. Esta estética, conocida en internet como «mob style» o «aesthetic», refleja la fascinación por la imagen de poder, lujo y ostentación vinculada a los clanes mafiosos, tanto en su versión clásica como en su reinvención moderna.

El concepto de «mob style» no es una novedad en sí misma. Desde el mundo del hip hop hasta el cine y la televisión, la mafia ha sido una referencia constante de poder y masculinidad. Temas como Real Gangsta Love de Trueno, las icónicas series Peaky Blinders y The Gentlemen, y películas como Scarface o Narcos han influido profundamente en la estética visual de los jóvenes, que ahora buscan emular la imagen de los mafiosos de lujo, tanto en su versión más clásica como en sus interpretaciones contemporáneas.

La celebración de Lamine Yamal: un tributo al lujo

El evento que celebró la mayoría de edad de Yamal no solo fue una fiesta de lujo, sino un espectáculo visual que exudaba simbolismo mafioso. En un video compartido por el jugador, se observaba una reunión de «clanes» que incluía a futbolistas y figuras de la música, todos vestidos con prendas llamativas y costosas, emulando la estética de las películas de mafiosos. Lo que, a simple vista, podría parecer una fiesta temática inspirada en la mafia italiana, era en realidad una mezcla de diversas representaciones de poder, desde los clásicos mafiosos de El Padrino hasta los más desmesurados personajes de Scarface o Narcos. La clave de esta estética era la ostentación sin miedo: cadenas de oro, diamantes, trajes costosos y accesorios exagerados como bastones cubiertos de diamantes.

Yamal, el centro de la atención, llevó el concepto de «mob style» al extremo con un conjunto de mocasines, pantalón acampanado y blazer blanco, complementado con anillos, pulseras, un reloj de oro y una cadena con sus iniciales y los colores del Barcelona, valorada en 400.000 dólares. Esta visión de lujo y poder fue catalogada por él mismo como «elegancia», un término que ha comenzado a tomar fuerza en las redes sociales como sinónimo de este tipo de ostentación. Este look de Yamal refleja la nueva percepción de la moda, donde el lujo ostentoso es el principal atractivo, una ruptura con las tendencias anteriores que buscaban un lujo más discreto.

El «mob style»: un fenómeno en auge en la cultura juvenil

La popularización de esta estética no se limita a Yamal. Durante el último año, las redes sociales han visto cómo el look de la «mob wife» (esposa de mafioso) comenzó a viralizarse, desafiando el concepto de lujo silencioso que había predominado en años anteriores. Esta tendencia se ha ido expandiendo, y ahora también los hombres se suman al fenómeno con lo que se denomina «mob husband», un término acuñado por el portal The Industry.Fashion, que describe colecciones con pieles, brillos y excesos, los cuales evocan una actitud de poder y riqueza desmedida.

Este fenómeno no solo refleja una inclinación hacia lo que impresiona visualmente, sino también una necesidad más profunda de confirmar el estatus en momentos de incertidumbre. El interés por lo políticamente incorrecto y lo «vetado» se ha convertido en una moda que exalta el lujo sin restricciones, el consumo extravagante y el festejo de la riqueza en un escenario donde lo excesivo ha pasado a ser una manifestación de autonomía y poder individual.

El mensaje de humildad: una llamada de atención en medio del exceso

Aunque la alegría en torno al evento fue notable, no todo fue recibido de manera positiva. El impacto de esta tendencia ha suscitado críticas, especialmente por su vinculación con la cultura relacionada con la mafia, una alusión que no todos consideran adecuada. Un ejemplo claro de estas críticas provino del grafitero italiano TVboy, quien pintó un mural del futbolista en Barcelona, representándolo como Superman. Con un mensaje claro, TVboy le aconsejaba a Lamine Yamal: “Estimado Lamine. La mafia no es algo con lo que se debe jugar. La verdadera grandeza siempre viene acompañada de humildad. Permanece humilde.”

Este mensaje de sencillez conecta con quienes creen que ostentar y copiar a figuras mafiosas puede ser una manera errónea de demostrar poder y éxito. Pese a la advertencia, lo real es que la moda del «mob style» sigue cobrando impulso, especialmente entre los más jóvenes, quienes ven en esta estética una manera de expresarse y establecer su lugar en un mundo que aprecia tanto la apariencia como el poder relacionado con la riqueza.

La estética de la mafia: una tendencia controvertida pero en auge

La fascinación por la estética de la mafia, con sus connotaciones de poder, opulencia y transgresión, ha encontrado un lugar en la moda actual, especialmente entre la generación Z. A través de figuras como Lamine Yamal, que han logrado mezclar el lujo con la cultura de la mafia, se está gestando una tendencia que desafía las normas del lujo tradicional. Mientras algunos celebran este retorno a la ostentación y el exceso, otros cuestionan si esta tendencia está realmente enviando el mensaje adecuado. No obstante, lo que es claro es que el «mob style» ha llegado para quedarse, al menos por ahora, como una de las principales influencias culturales en la moda juvenil.